La evolución en el proceso comunicativo de la persona y su sociedad se ha ido transformando según los avances científicos y tecnológicos. En la comunicación construimos nuestra identidad, nos coordinamos para acciones futuras y aprendemos nuevas habilidades y competencias; es importante observar esto porque todo cambio tecnológico que nos otorgue mejores y más eficientes medios de comunicación impactará en la humanidad. Sucedió con la escritura dando paso al conocimiento de generación en generación, después con la imprenta dando paso a la alfabetización y sucede ahora con internet dando paso a la comunicación inmediata en múltiples medios, video llamadas grupales, mensajería instantánea, videos instruccionales, grupos de debate, exámenes en línea, libros en línea, artículos especializados, plataformas educativas, envío inmediato de archivos, entre otras múltiples bondandes.
Hoy en día las pautas de participación son más activas; ya no es suficiente con saber que ocurrió sino también aflora un incesante deseo de opinar. El uso de las redes sociales se ha incrementado. Las opiniones y comentarios de Facebook, Youtube, Whatsapp e Instagram nos determinan la existencia; vulneran la personalidad, pero, no dejan de ser una herramienta de comunicación inmediata y casi instantánea para identificar la postura crítica de la sociedad.
Para los adolescentes las redes sociales les significan posibilidades externas, es decir, por un lado significa oportunidad para tener más amigos, ser populares, conocer nueva información, aplicar contenidos conocidos; pero, por otro lado significa arriesgar su integridad, vulnerar su privacidad y atentar contra su dignidad.
Como padres debemos educarlos hacia el uso adecuado y pertinente de las redes sociales, así como orientarlos en información que los potencie como personas.
¿Qué recomendarles a los hijos adolescentes respecto al uso de las redes sociales?
La respuesta es fácil:
Recuerda, las redes sociales influyen en el aprendizaje de tus hijos, por eso deben ser usadas en forma razonada.